Amor by Himeko Rose [Concurso Aniversario de Drabbles]

Título: "Amor"
Personaje/s central/es: Makishima Shogo
Cantidad de palabras: 424

Dos personas en la soledad, sin que su alrededor afectara en lo más mínimo, frente a frente, buscando una respuesta a la gran incógnita “El amor”.

- ¿En serio usted cree que el amor como esencia existe? - casi parecía sonreír en una burla aquel albino.

- El amor existe – menciono la dama.

- ¿Por qué lo dice? - Makishima estaba curioso. - Porque lo he sentido - aquella mujer hablo con gran determinación.

 - ¿Usted no cree que el amor es una construcción social? - el albino recargo su mejilla en su mano, observándole con gran curiosidad.

 - No puede decir eso cuando es algo del alma- sus mejillas se tornaron de un carmesí, avergonzada de sus palabras.

 - ¡Hmp! Interesante ¿Qué tiene que ver con el alma? – su interés crecía cada vez más.

 - Es algo esencial, algo que se siente en todo nuestro ser, cuando buscamos mostrarnos tal y como somos - la dama no sabía cómo explicarlo con palabras.

 - Como si dejara que rompieran mi cabeza y vieran a través todo lo que hay dentro de mi ¿no es así? – Los ojos dorados brillaban con intensidad como si comprendiera lo que la dama le decía.

- No, no es eso, es darlo todo por el bienestar del otro – negaba con las manos tan extraña descripción.

 - No lo entiendo - su mirada se opacaba con un deje de cansancio.

 - Es una expresión del alma - atino a decir aquella dama.

 - ¡Oh! ¿Entonces no cree usted que es una ilusión? – mantenía respeto hacia ella. - No, no es una ilusión, pascal menciona “El primer efecto del amor es inspirar un gran respeto; se siente veneración por quien se ama” lo cual es darlo todo, pues es tu mayor tesoro, el tesoro del alma - la dama sentía una gran incomodidad.

El joven albino miraba hacia la ventana como si el cielo pudiera dar una respuesta a su incógnita, pero no comprendía nada. De los ojos de aquella dama se derramaron unas cuantas lágrimas al ver la expresión del joven que parecía inerte ante los ojos de ella. La mujer aclaro su garganta para llamar su atención.

 - Es algo que se debe vivir, si no lo hace, jamás encontrara el mayor esplendor del alma - esperaba que el entendiera.

 El volteo y vio aquellas lágrimas, cerro su libro con tranquilidad y sin pensarlo una vez más dejo aquella mujer sola en esa habitación, cerro con llave, pues aquella mujer que parecía importante, podría ser un rehén muy interesante.